Miguel Ratero
Maestro Armero.
Practicante de tiro con escopeta desde 1.999.
Practicante de tiro con rifle en la modalidad de PRS.
Practicante de tiro con arco.
Cazador de caza menor y mayor.
Ya estoy aquí de nuevo con ustedes y espero aclarar más dudas y conceptos que pudieran estar aún turbios.
Vamos hoy a continuar con las diferentes modalidades de caza mayor.
En el número anterior hablamos de “La Montería”, de sus necesidades particulares, de las armas y municiones más adecuadas para utilizar si tomamos parte en una de ellas y hoy continuaremos con otras modalidades de caza mayor practicadas en nuestros campos.
Por su similitud con La Montería vamos a hablar de “Batidas” y “Ganchos”:
Hablamos de similitud con La Montería porque se utilizan igualmente perros para llevarlas a cabo y mover de sus encames a los animales. Son similares también porque los cazadores se disponen en el monte en puestos fijos.
Y son similares porque las armas que aconsejamos para la práctica de ambas son las mismas que para La Montería pero, existen algunas diferencias que pasamos a describir.
BATIDA:
Es una modalidad muy popular en la mitad norte de nuestro país, suelen tomar parte en ella un número muy inferior de cazadores en comparación con La Montería y se utilizan perros para levantar los animales de sus encames pero de un modo muy diferente.
En Las Batidas los perreros toman algunos de sus mejores canes (habitualmente perros de rastro del tipo Sabueso, Azul de Gascuña etc) y antes de que ningún cazador se coloque en su puesto revisan barrancos y laderas para encontrar rastros frescos de esa misma noche.
Con su conocimiento del terreno y las reacciones de sus fieles perros que aún llevan atados con sus “traíllas” (correa larga para darle cierta libertad al perro pero llevarlo controlado), los perreros determinan en que zona del coto debe haber bichos encamados y, antes de soltar los perros indican qué zona se va a cazar para que los cazadores tomen posición en sus puestos.
Los puestos, como no podía ser de otra manera, los determinan la experiencia y el conocimiento de las querencias de las reses, o sea que son los cazadores más experimentados de la zona los que suelen saber por dónde intentan huir los animales de cada paraje y, tras analizarlo, indican a cada cazador dónde debe ponerse y cómo debe actuar.
Cuando ya están “puestos” los cazadores se da suelta a los perros pero, a diferencia de La Montería, se sueltan un número muy inferior de animales y casi todos son perros de rastro, perros con mucha ”voz” que en cuanto cogen un rastro fresco de algún bicho no dejan de “latir”, ladrar y aullar hasta llegar a él y hacerlo correr.
Como hemos dicho al principio en Las Batidas toman parte pocos cazadores, en ocasiones 6 u 8 y podemos poner un máximo de 14 o 15.
Imaginaos la dificultad que tiene cubrir en la montaña Asturiana un buen pedazo de terreno con tan solo 7 u 8 cazadores, por ello hay que decir que se suelen abatir un número inferior de piezas comparado con Las Monterías pero es un modo muy diferente de cazar y muy influenciado por la orografía.
Los cazadores deben estar no solo pendientes de si se acerca algún animal sobre el que pueda disparar, sino que, si eso ocurre, lo más probable es que detrás de él vaya un perro con un olfato brutal que, si no le detenemos puede salirse del país siguiendo un rastro.
Así pues, el cazador debe estar atento a la caza y también a las carreras de los perros, para detenerlos cuando puedan salirse de la zona que se está cazando y así facilitar la labor a los compañeros perreros en la recogida de sus perros.
Por supuesto cada cazador recoge las piezas que haya abatido, aquí no toman parte muleros ni gente exclusivamente para recoger las reses abatidas, sino que todos arriman el hombro y hacen de todo para el buen término de la cacería.
Tal y como hemos dicho, para Las Batidas recomendamos el mismo tipo de armas que se utilizan en Las Monterías ya que, los disparos se efectúan en unas condiciones similares, suelen ser lances rápidos donde deberemos encararnos rápidamente, tomar miras y disparar sobre un animal lleno de adrenalina que huye de los perros.
Por todo ello necesitamos un arma manejable, corta, con un encare rápido, con un calibre contundente y si utilizamos visores, estos deben ser con pocos aumentos para que tengan un campo de visión muy grande o visores de tipo holográfico.
GANCHOS:
En este caso vamos a describir la modalidad como una MINI Montería.
Los Ganchos si que son muy similares a Las Monterías y su funcionamiento es muy, muy parecido, tan solo se diferencian en que se llevan a cabo en una superficie de terreno mucho más pequeña, que toman parte muchos menos cazadores y también muchos menos perros.
Siendo un Gancho una Montería en pequeño podemos asegurar también que el equipo que vamos a necesitar es el mismo.
De este modo, para todas nuestras Monterías, Batidas y Ganchos recomendamos:
• Rifles express
• Rifles semiautomáticos
• Rifles de cerrojo.
• Rifles de palanca.
• Escopetas semiautomáticas.
• Escopetas superpuestas.
• Escopetas paralelas.
Todos ellos en calibres contundentes capaces de detener un animal en plena huida , de longitud contenida, con miras que puedan tomarse rápidamente y con los cuales podamos disparar varias veces rápidamente.